Muchas de nosotras desconocemos qué es un Mioma hasta que un día en un estudio pélvico nuestro ginecólogo o ginecóloga nos habla de la existencia de alguno. Es en este momento cuando nos asaltan mil preguntas acerca de los peligros a los que nos enfrentamos. Para dar respuesta a todas tus dudas el grupo de profesionales de Clínica Pedrosa ponemos a tu disposición en este artículo toda la información que necesitas conocer sobre el mioma.
¿Qué es el mioma?
Un Mioma, es un tumor benigno en la zona de la pelvis de la mujer. Es el tumor ginecológico más frecuente, el 70 % de las mujeres lo desarrollan a lo largo de su vida, siendo máxima su incidencia en la quinta década de la vida.
El mioma uterino es un tejido anormal de músculo liso que se localiza en y alrededor del útero y en ocasiones en el cuello uterino. Estos miomas derivan de las células de músculo liso que existen en el miometrio o pared del útero. En la mayoría de los casos son múltiples, pero ocasionalmente pueden ser únicos.
Los miomas uterinos se suelen clasificar según su localización en:
- Subserosos; Suelen ser el 55%.
- Intramurales; Aproximadamente representa el 40%.
- Intracavitario; Solo un 5% de los casos.
La causa no está bien establecida. Hay evidencias que sugiere que depende de las las hormonas femeninas (estrógenos y progesterona) para su desarrollo y crecimiento. Actualmente se desconocen los mecanismos por los cuales se producen los miomas, pero se considera que puede influir ocasionalmente el factor hereditario en la aparición de los miomas uterinos.
Síntomas del mioma uterino
Los signos y síntomas de los miomas uterinos suelen aparecer en, aproximadamente un tercio de las mujeres que son diagnosticadas de mioma uterino. Pueden presentar la siguiente sintomatología:
- Masa abdominal
- Hemorragia uterina anormal
- Dolor en la pelvis o en el abdomen bajo
- Lumbalgia
- Síntomas urinarios
El signo más común suele ser la hemorragia uterina anormal, llamada metrorragia (menorragia si coincide con la regla), aunque este síntoma dependerá de donde esté situado el mioma.
Los miomas que se encuentran dentro de la cavidad uterina, denominados miomas suserosos, son los que desencadenan mayores síntomas hemorrágicos tanto en la menstruación, como en los periodos intermenstruales. Aún así, la hemorragia es el signo más característico de los miomas.
Las hemorragias en los casos más severos suelen provocar anemias ferropénicas. En algunos casos, cuando el volumen de los miomas es considerable pueden desencadenar compresión de vísceras abdominales, acompañado de dolor, sensación de ganancia de peso, micción frecuente por la presión directa en la vejiga urinaria.
Los miomas con un crecimiento más rápido o los que se encuentran localizados hacia el exterior de la cavidad uterina suelen presentar un dolor menstrual evolutivo y aumento de la dismenorrea, provocando una intensa aflicción.
Factores de riesgo del mioma uterino
Algunos de los factores de riesgo que influyen en el desarrollo y evolución de los miomas uterinos pueden ser:
- La edad. Habitualmente suelen ocurrir en mujeres entre los 30 y los 50 años y normalmente disminuyen de tamaño después de la menopausia. Frecuentemente no requieren tratamiento.
- La raza; Tiene mayor prevalencia en mujeres afroamericanas.
- Herencia familiar; la incidencia es mayor en mujeres (con al menos tres familiares de primer grado con miomas sobre todo si el mioma se desarrolló antes de los 45 años.
- Factores de la reproducción; Son menos frecuentes en mujeres que han tenido hijos en una edad temprana o han tenido varias gestaciones con viabilidad fetal o con un corto intervalo de tiempo desde la ultima gestación.
- La dieta rica en vitamina A y alto consumo de carnes rojas.
- Hipertensión.
Diagnóstico del mioma uterino
Se calcula que una de cada cuatro o cinco mujeres presenta miomas uterinos. Para un diagnóstico precoz, es recomendable realizar revisiones periódicas con tu ginecólogo. El diagnóstico de los miomas en general se suele detectar con un simple examen pélvico manual por parte de tu ginecólogo.
En algunos casos se suelen utilizar métodos como la ecografía pélvica, la tomografía axial computerizada, la resonancia magnética, la histeroscopia o la la paroscopia diagnóstica.
Fertilidad y embarazo
No existe una clara relación entre mioma e infertilidad en relación al desarrollo de miomas uterinos.
En mujeres en las que los miomas uterinos miden más de 4 centímetros pueden surgir complicaciones como partos prematuras, dolor pélvico en fases de la gestación, desprendimiento de la placenta y porcentaje alto de cesáreas.
Rara vez pueden contribuir a un problema de infertilidad femenina. Aunque hay que tener en cuenta que como causa única de infertilidad solamente aparecen en el 2 al 3% de pacientes infértiles. También se han relacionado con abortos de repetición.
Cuando los miomas se anteponen a la presentación del feto y taponan el canal del cuello uterino dificultando la salida, se hace necesario la práctica de una cesárea electiva.
¿Los miomas uterinos son cancerígenos?
En el músculo uterino puede desarrollarse un cáncer de ovario denominado leiomiosarcoma, este es un tumor de escasa incidencia ya que alrededor de 1 de cada 10.000 miomas diagnosticados será un tumor maligno. En estos casos el crecimiento del mioma suele ser rápido y esto hay que tenerlo especialmente presente en pacientes post-menopáusicas.
Para la mayoría de los casos, los miomas no son la base original de estos tumores, sino que los leiomiosarcomas, son cánceres originados como tal desde el principio. El mioma no es un cáncer.
Tratamientos de los miomas uterinos
El tratamiento de los miomas uterinos no todos tienen que operarse, aquellos miomas que no presentan síntomas y son pequeños, pueden ser controlados periódicamente sin cirugía e, incluso, muchos de ellos por sus características no precisan siquiera seguimiento.
En mujeres con síntomas como el sangrado uterino anormal, aflicción o presión si requieren de control y seguimiento. En estos casos se valora las características de los miomas, pudiendo optar por un tratamiento médico o por un tratamiento quirúrgico.
La cirugía para retirar los miomas o la extirpación del útero en mujeres con deseos de maternidad cumplidos se aplicaría a pacientes que no responden a los tratamientos médicos y se viera afectado el aumento de miomas o el crecimiento considerable.
El tipo de cirugía para el tratamiento quirúrgico de los miomas uterinos dependerá de la localización, sintomatología, tamaño, decisión de la paciente a preservar su fertilidad o el tipo de menstruación.
